Quien
brinda una sesión de PB debe ser un espejo limpio donde el Ser del otro se vea
reflejado; para conseguirlo ira expandiendo su conciencia desde la fuente, en
el centro de su Ser y permanecerá en él, en un estado de profunda quietud y
libertad.
Ese centro
es el mismo centro dinámico que compartimos todos los seres en el universo
entero, de forma que al reconectar con el Centro se deja atrás el sufrimiento,
ya que se revela la Fuente
de nuestro Ser.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario